¿Quién es José Ramón Navarrete?
Además del CEO y alma mater del club de Bigastro, José Ramón Navarrete ha perseguido su pasión incansablemente gracias a su trabajo en Metro Dance Club, expandir el amor por la música a varias generaciones. Charlamos con él sobre su increíble trayectoria y nuestra querida Metro.
Antes de meternos en profundidad nos gustaría conocer quién es José Ramón, ¿dónde y cómo nació tu pasión por la música y cuál ha sido tu trayectoria profesional antes de Metro Dance Club.
Pues José Ramón es una persona que vive por y para la música. Desde muy jovencito participaba en todos los movimientos musicales que estaban a mi alcance, como era devorando la música en la radio donde me grababa cintas. Mis padres tenían una discoteca y luego otra y ahí fue donde hice mis primeros pinitos, colándome en la cabina con los DJs y empezando a sentir la música en la pista de baile. Allí dónde había música ahí estaba yo. Y nada, en 1987, a los 17 años estábamos abriendo Metro.
Todo el mundo en este país que ama la música electrónica sabe qué es Metro Dance Club, pero a lo mejor desconoce su historia. ¿Cuándo y cómo se fundó Metro Dance Club y por qué elegisteis una ubicación tan especial como el chalet de Bigastro?
Pues como te comentaba se remonta a 1987. Metro nació en un antiguo cine a la afueras del pueblo de Bigastro. De aquí es de donde nació el nombre de Metro, de la Metro Goldwyn Mayer Studios y nuestro logo era el león de la Metro. Más bien era un cachorro circundado por una película de celuloide como el logo original, pero dibujado de una manera muy infantil. La decoración que hicimos eran grandes murales con las escenas más emblemáticas de la historia del cine. Humphrey Bogart, Ingrid Bergman en Casablanca o Rita Hayworth y Glenn Ford en Gilda llenaban las grandes paredes de este espacio en el que no faltaba una gran pantalla de cine y una enorme parabólica. Y gracias a esta parabólica que nos conectaba con el mundo exterior y los maleteros que nos traían la música importación, empezó nuestra andadura con la música. Teníamos acceso a cosas que en nuestro país no se conocían o eran súper novedosas. En poco más de un año ya estábamos siendo un local de éxito y por esa razón tuvimos que cerrar. Demasiado éxito para estar ubicados dentro del pueblo. Se nos fue de las manos con tanta gente que venía de fuera de Bigastro a ese soplo de cultura musical. Fue entonces cuando me fui fijando en el chalé que estaba bastante alejado del pueblo y todo fue sucediendo y poniéndose de cara para que pudiéramos montar los principios de lo que hoy en día es Metro Dance Club. A este nuevo emplazamiento le llamamos “Sigue Sigue Metro” de ahí nuestro querido logo del hombrecillo corriendo que era uno de los tres hombrecillos que conformaban esta sucesión. En cuanto al nuevo espacio quisimos dejar todo lo que la casa tenía sin tocar nada de su estructura ni de su idiosincrasia, pero sí metimos la mejor tecnología que en aquellos años disponíamos.
Si por algo destaca Metro Dance Club es por ser fiel a sus principios durante todos estos años. ¿Nos podrías resumir los puntos principales de su filosofía?
La filosofía es la misma desde el primer día, pasión por lo que hacemos, mucho cariño y cuidado con los detalles de cada evento para lo que invertimos mucho tiempo y trabajo. Queremos crear experiencias inolvidables que hagan felices a nuestros clientes, experiencias basadas en la felicidad, el respeto, la tolerancia y la igualdad que son los valores principales bajo los que se rige Metro. En Metro Dance Club todos somos iguales, unidos bajo una misma pasión, la música. Da igual la edad, la orientación sexual, nacionalidad, religión, status…Por esa razón en Metro no tenemos vips, todos somos vips y todo el mundo es bienvenido si comulga con estos valores y viene con ganas de pasárselo bien. De ahí el lema que adorna nuestras salas “You´ll never dance alone”. A esto le sumamos un excelente sonido, la mejor música del momento acercando los mejores DJs mundiales y un buen equipo de trabajo con el que contamos, un equipo muy humano, que le emociona su trabajo, que es cercano, agradable y atento a nuestros clientes… y la fórmula es infalible.
Otro aspecto que sobresale en Metro Dance Club es la fidelidad de su comunidad. ¿Cómo explicarías esta relación tan especial?
Pues es muy sencillo, todo lo que hacemos lo hacemos pensando en ellos, en nuestros Metrolovers. En cómo lo van a vivir y cuál va a ser el resultado de la experiencia que se van a llevar. El respeto y la tolerancia que comentaba antes y la cercanía de Metro hace que nuestro público se sienta parte de esta gran familia Metro y que se sientan como en casa. De ahí nuestro claim “Our home is your home”. Ya que ese es nuestro propósito, que la música les emocione y que sienta cómodos y felices en casa.
Metro Dance Club no es un club al uso, ya que además estáis metidos en otras iniciativas dentro de la cultura clubbing. Metro Dance School es un ejemplo, ¿qué nos puedes contar de vuestra academia?
Pues con este proyecto vamos a cumplir ya 4 años y estamos muy contentos tanto con el trabajo realizado como por nuestros alumnos que están súper preparados y motivados. Impartimos cursos de DJs, de producción, y masterclases de varios tipos. Tenemos un equipo de docentes muy profesional. Este es el verdadero valor añadido de Metro Dance School, el profesorado, sus conocimientos y bueno, el lugar donde se imparten las clases claro, ya que las prácticas son en las mismas cabinas de las emblemáticas salas del club. Al acabar con éxito su formación pasan a formar parte de la programación en alguno de los eventos MDC.
En Metro Dance Club tenéis un grupo de DJs residentes y DJs habituales que aportan una pátina diferente al club. ¿Qué nos puedes contar de ellos y del sello Metro Dance Records?
Los DJ´s residentes son un poco el buque insignia de Metro, junto con los headliners hacen que los eventos sean tan especiales musicalmente hablando. Cada sala tiene su estilo y sus residentes también, aunque a veces cambiamos el registro y se transforman en otros. Todos los residentes producen en los sellos de Metro: Metro Dance Records que es un tecnho más melódico y Metro Dance Records Black Series, que es un techno más de recreo, más tech-house.
Este pasado 2023 ha estado lleno de momentos increíbles en Metro Dance Club, ¿nos podrías contar de aquellos de los que guardes un especial recuerdo?
Todos los eventos de Metro son increíbles, siempre es una experiencia nueva y nunca te dejan indiferente, pero si hay que inclinarse por alguno pues musicalmente hablando ver a Amelie Lens súper embarazada, dándolo todo y disfrutando en la cabina como una niña. A Indira Paganotto, artista a la que tenemos mucho cariño y a la que hemos visto crecer profesionalmente y estamos súper contentos con sus logros. Disfrutar de Jeff Mills bailar en cabina, dándose vueltecitas con una alegría sorprendente como si fuera un chaval. Todo esto trasmite y emociona mucho. Y con respecto al público me emociona mucho cuando padres e hijos vienen juntos a disfrutar de la música y la experiencia. Y esta es otra de las particularidades de Metro Dance Club, al llevar casi 37 años en activo, varias generaciones confluyen al mismo tiempo entre nuestros muros con un mismo propósito, disfrutar de la música. Es muy bonito.
¿Y para este 2024 que nos vamos a encontrar en Metro Dance Club?
Pues lo mejor está por llegar. Este 2024 va a ser muy apasionante. Tendremos una programación de infarto, grandísimos artistas acompañados de nuestro elenco de residentes. Y muchas mejoras y sorpresas. Cuando un equipo está emocionado con su trabajo y disfrutando de lo que hace, solo pueden aflorar iniciativas muy buenas.
¿Cuál es la parte más satisfactoria de tu trabajo y cuál es la más ingrata?
Este oficio tiene muchísimo trabajo y mucha presión. Tienes que sentir esa pasión por la música que comentaba antes para poder llevarlo a cabo. Y lo más bonito, satisfactorio y a la vez súper emocionante es cuando te metes en el medio de la pista y miras alrededor y ves a tantas personas con la sonrisa en la cara disfrutando, felices… Por eso es por lo que trabajo y trabajaré cada día de mi vida. Ojala este sentimiento en la calle fuera así. Mi propósito y el de Metro es hacer felices a la gente con la música. “La felicidad se mide en bailes” en Metro Dance Club.
Y la parte ingrata pues es que a veces no se agradece todo ese trabajo y la dedicación que conlleva hacer las cosas bien y con mucho amor. Y que encima las critiquen, pero creo que es parte del juego.
¿Por dónde pasa el futuro de Metro Dance Club?
Pues yo creo que estamos pasando por la mejor etapa y el futuro será seguir manteniéndonos fieles a nuestros origines como hasta ahora, seguir siendo un club con alma, sostenible empático, amigable, anticipándonos a la nuevas tecnologías y sobretodo en intentar que escuchemos la mejor música y que tengamos a los mejores artistas de este mundo tan bonito que es la electrónica. ¡Larga vida al techno!
