De vez en cuando aparece un DJ o productor que inspira el imaginario colectivo. A través de sus sesiones de DJ o sus producciones en sellos como M_nus, Cadenza, Ovum, Four Twenty y Cocoon, fusiona perspectivas en su delicado sentido de los sonidos y atmósferas reflexivas, apuntaladas con grooves sólidos y físicos inspirados en el hip hop que fue su primer terreno sonoro a mediados y finales de los 90. Sus sesiones de DJ, ya sea en la mayor fiesta rave de Alemania, Timewarp, en Cocoon (Ibiza) o en una fiesta en la playa de Sudamérica, son orquestaciones espontáneas alimentadas por los matices de una noche, un lugar o un público. 

Se trata de una perspectiva cinematográfica y de dirección que impregna la vida cotidiana de Dice, y que no sólo procede de las extravagantes escapadas y líos que a veces se ha encontrado viviendo en la vida real. También procede de elaborados guiones cinematográficos imaginados cuando era un joven Loco Dice en las calles de Flingern, en Düsseldorf, y en las islas Kerkennah, en Túnez. Esta sigue siendo una costumbre de Loco Dice hoy en día: cerrar los ojos durante un minuto y ver toda una cornucopia de escenas y atmósferas.